¿Qué es un transgénico?
POR EL DOCTOR CARLOS ARTURO ALLEN SISNIEGA.
Un
transgénico u Organismo Modificado Genéticamente (OMG) es un organismo vivo que
ha sido creado artificialmente manipulando sus genes. La manipulación genética
consiste en aislar segmentos del ADN (el material genético) de un ser vivo
(virus, bacteria, vegetal, animal e incluso humano) para introducirlos en el de
otro. Por ejemplo, el maíz transgénico que se cultiva en España lleva genes de
bacterias, para producir una sustancia insecticida. Y la patata transgénica aprobada
en marzo de 2010, llevaba un gen que podría anular el efecto de ciertos
antibióticos. Actualmente, la propia empresa BASF ha abandonado los planes de
desarrollo y comercialización de esta patata transgénica en Europa debido a la
oposición
de
de la mayoría de consumidores, agricultores y clase política. La diferencia
fundamental con las técnicas tradicionales de mejora vegetal es que la
manipulación genética permite franquear las barreras entre especies para crear
seres vivos que no existían en la naturaleza. Se trata de un experimento a gran
escala en que se nos involucra a todos en contra de nuestra voluntad. Además,
la manipulación genética está basada en un modelo científico obsoleto y que
está en entredicho. El sistema de evaluación de riesgos de la UE está repleto
de trampas e irregularidades.
Tras
años de debate público, la mayoría de los ciudadanos españoles, al igual que
los del resto de Europa, mantiene una actitud contraria a los transgénicos.
Esta oposición ha llevado a muchas empresas a eliminar los ingredientes
transgénicos de sus productos.
¿Por qué Greenpeace se opone a la liberación
de transgénicos al medio ambiente?
El
cultivo de transgénicos supone incremento del uso de tóxicos en la agricultura,
contaminación genética, contaminación del suelo, pérdida de biodiversidad,
desarrollo de resistencias en insectos y ‘malas hierbas’, riesgos sanitarios y efectos
no deseados en otros organismos. Los efectos sobre el conjunto de los seres
vivos son irreversibles e imprevisibles.
Los
riesgos sanitarios a largo plazo de los OMG presentes en nuestra alimentación o
en la de los animales cuyos productos consumimos no se están evaluando
correctamente y su alcance sigue siendo desconocido. Nuevas alergias, aparición
de nuevos tóxicos, pérdida de eficacia de ciertos medicamentos o efectos
inesperados son algunos de los riesgos.
Los
OMG refuerzan el control de la alimentación mundial por parte de unas pocas
empresas multinacionales. Son una de las armas predilectas de estos dictadores
de la alimentación, y lejos de constituir un medio para luchar contra el
hambre, aumentan los problemas alimentarios. Los países que
han
adoptado masivamente el uso de cultivos transgénicos son claros ejemplos de una
agricultura no sostenible. La solución al hambre y la desnutrición pasa por el
desarrollo de técnicas sostenibles y justas, el
acceso
de los pueblos a los alimentos que producen y el empleo de técnicas como la
agricultura y la ganadería ecológicas. La industria de los transgénicos utiliza
su poder comercial e influencia política para desviar los recursos financieros
que deberían destinarse a proteger las verdaderas soluciones a los problemas
agrarios y alimentarios del mundo.
¿Cómo está la legislación de etiquetado? La actual legislación europea de etiquetado obliga a etiquetar los productos que deriven de
cosechas transgénicas, independientemente de la presencia de ADN o de proteína
‘transgénica’ en el producto final. Así, cualquier alimento que contenga OMG o
ingredientes que deriven de éstos debería
declararlo en su etiqueta. Se trata de un primer
paso fundamental para que podamos ejercer nuestro derecho a elegir alimentos sin
transgénicos. Sin embargo, esta normativa apenas se aplica. Greenpeace ha realizado análisis en alimentos en los que se ha
detectado presencia transgénica con un porcentaje muy superior al 0,9% . No
constaba en la etiqueta.
¿Transgénicos en mi plato?
Los
cultivos transgénicos utilizados para alimentación humana en la UE son
fundamentalmente algunas variedades de maíz y de soja. Por eso en esta guía figuran
solamente aquellos alimentos que contienen al menos un ingrediente o aditivo
producido a partir de estos cultivos. El maíz, la soja o sus derivados
industriales están presentes en más del 60 por ciento de los alimentos transformados,
desde el chocolate hasta las patatas fritas, pasando por la margarina y los platos
preparados.
Un
alto porcentaje del maíz y de la soja que llegan a España provienen de países
que cultivan transgénicos a gran escala, como Argentina o Estados Unidos.
Además, se cultivan unas 116.000 hectáreas de maíz transgénico (es el único país de los 27 de la UE
cuyo Gobierno ha venido tolerando desde 1998 su cultivo a escala comercial). Algunos
ejemplos de ingredientes y aditivos derivados del maíz y de la soja, y por
tanto ‘sospechosos’ de tener un origen transgénico, son:
● Soja: harina, proteína, aceites y grasas (a menudo se ‘esconden’
detrás de la denominación aceites/grasas
vegetales), emulgentes (lecitina–E322), mono y diglicéridos de
ácidos grasos (E471), ácidos grasos.
● Maíz: harina, almidón*, aceite, sémola, glucosa, jarabe de glucosa,
fructosa, dextrosa, maltodextrina, isomaltosa,
sorbitol (E420), caramelo (E150), grits.
ATENCIÓN: ‘Almidón modificado’ hace
referencia a una transformación físico-química sin relación con los
transgénicos.
NOTA:
esta guía corresponde al mercado alimentario español y se ha elaborado en
función de las garantías que nos han ofrecido los fabricantes de alimentos presentes en España con
respecto a su política de utilización de ingredientes transgénicos
o derivados, los análisis que hemos realizado y la presencia de ingredientes
transgénicos en el etiquetado. Además, los OMG entran masivamente en la cadena alimentaria a través
de los piensos utilizados para alimentar animales. Si bien la ley obliga a etiquetar
los piensos transgénicos, no sabemos si la leche, la carne o los huevos
que consumimos provienen de animales alimentados con piensos transgénicos
porque la legislación no obliga a etiquetar el producto final. ¡Sin embargo,
los riesgos para el medio ambiente y para la salud global del planeta son
los mismos! Si esto sigue así, los transgénicos continuarán invadiendo
nuestros
campos
y harán de la agricultura una práctica aún más insostenible.
Greenpeace
trabaja ahora para erradicar los transgénicos también de los
piensos.
Debemos exigir a las empresas que digan NO a
los productos derivados de animales alimentados con estas peligrosas cosechas.
¿Cómo puedo actuar?
● No compres transgénicos
Para
garantizar una cadena alimentaria libre de transgénicos y de sus derivados, debemos
seguir rechazando su empleo por parte de la industria. Compra productos de la
lista verde. ¡Contamos con el uso de tu libertad de elección a la hora de comprar!
Greenpeace recomienda consumir ecológicos como primera opción.
● Hazte observador/a de
transgénicos
En
www.greenpeace.org/espana/campaigns/transgenicos, en la sección de
Observadores
de Transgénicos encontrarás las explicaciones: es tan sencillo como mirar las
etiquetas de los productos que te encuentres en el mercado y verificar si alguno
de los ingredientes es transgénico. Debe
tener la mención
"modificado genéticamente" o
"producido a partir de -nombre del
ingrediente- modificado genéticamente".
Si
se encuentra alguno, sólo hay que anotar los datos del producto (marca,
fabricante,
distribuidor, ingredientes modificados genéticamente), los datos
del
lugar dónde se ha encontrado (nombre de la tienda, localidad, fecha) y, si es
posible, sacar una foto y, posteriormente, informar a Greenpeace. Para ello
sólo hay que enviar un correo electrónico con todos los datos y la foto a info@greenpeace.es (Anotando PRODUCTO TRANSGÉNICO en el asunto).
RECUERDA:
‘Almidón modificado’ hace referencia a una transformación físico-química sin
relación con los transgénicos.)
● Devuelve los productos transgénicos
Si
compras sin darte cuenta un producto cuya etiqueta indica que contiene
transgénicos, pide al comerciante que te lo cambie o que te devuelva el dinero.
Pide a tus amigos que hagan lo mismo.
● Compra productos ecológicos
En
la agricultura y la ganadería ecológicas no está permitido el uso de
transgénicos ni sus derivados. Por tanto, en esta guía no se incluye productos
ecológicos sino de los alimentos producidos de forma convencional, por ser
estos sospechosos de contener transgénicos. En caso de empresas con dos líneas
de producción (ecológica y convencional), sólo se incluirán los
producidos de forma convencional.
EN MEXICO; LA
PRODUCCIÓN AGRICOLA ESTA EN DECADENCIA. TENEMOS QUE COMPRAR DE ESTADOS UNIDOS
MUCHOS DE LAS SEMILLAS DE MAIZ, TRIGO Y OTROS PRODUCTOS YA ELABORADOS CON
TRANSGENICOS. HASTA EL CHOCOLATE QUE ES NATIVO DE MÉXICO TENEMOS QUE COMPRARLO
DE NACIONES COMO AFRICA. PARECE QUE A LAS AUTORIDADES NO LES IMPORTA LA SALUD
DE LOS MEXICANOS.