¿QUE ES LA LECHE.?
POR EL DOCTOR CARLOS ARTURO ALLEN SISNIEGA.
La leche es una secreción glandular característica de
todos los mamíferos.
Los mamíferos son un orden de animales cuyas hembras
poseen unas glándulas especiales (mamas) destinadas a alimentar a sus crías en
las primeras etapas de su vida.
Una vez que la cría alcanza un desarrollo suficiente para
alimentarse de manera autónoma, la leche es abandonada y jamás volverá a ser
utilizada en la edad adulta.
El ser humano es el único mamífero que infringe la “ley
natural”: no se desteta nunca, sigue consumiendo leche durante toda su vida
• En este sentido, la mayoría de los niños pierden a
medida que crecen la enzima que permite digerir la lactosa de la leche, como
parte natural de su desarrollo coincidiendo con el destete. De una especie a
otra
• El ser humano no sólo sigue tomando leche toda la vida,
sino que además se trata de leche de otras especies, no la de la propia especie
• Pero cada leche posee una formulación especialmente
“diseñada” para alimentar a las crías de esa especie. Aunque su aspecto blanquecino
sea similar, las leches son diferentes. La leche humana está hecha para el
metabolismo humano y la de vaca para el metabolismo de ese animal. El contenido
en grasas y proteínas de la
leche de vaca resulta excesivo para el ser humano, y las
proporciones de glúcidos y minerales también son distintas, y además varían
segúnla fase de la lactancia. Por otro lado, la leche sirve de vehículo de transmisión
entre madre y bebé de una variedad todavía no muy bien conocida de hormonas,
anticuerpos y otros factores inmunológicos.¿Consumirías leche humana?
• Si se comercializase “leche humana” para consumo de
personas adultas, habría que admitir (dentro de lo absurdo) que se trataría de un producto más adecuado para nuestra fisiología. Pero
¿porqué no se ha hecho hasta ahora?
• Probablemente porque no habría demasiadas mujeres
dispuestas
a convertirse en “donantes” intensivas, y se ha tenido
que
recurrir a los animales, que no pueden negarse a ello
• Además es probable que, paradójicamente, nos resultase
más
repulsivo tomar leche de mujer que la leche de los
animales. El alimento más “natural”
• Un tema que cada vez plantea más interrogantes.
Si la leche es ese alimento tan excelente, ¿por qué la
industria necesita promocionarla con tanta publicidad
para convencer a los consumidores? ¿Y por qué cada
vez lanza al mercado más variedades
"modificadas" o
adaptadas? (desnatadas, sin lactosa, con calcio, con
omega-3, con soja, etc.)
• Es un intento de tapar sus defectos, perseverando en la
idea de que todo el mundo debe tomar leche, aunque
tenga que ser adaptada
• En los últimos años, incluso la propia industria
lechera
está diversificando su oferta hacia los preparados a
base de soja... Y no es para menos. Los estudios
científicos están demostrando cada vez más que la
leche de vaca no es la panacea que nos prometían, y
que su consumo conlleva serios inconvenientes.
Mientras que las alternativas vegetales pueden ser más
saludables y plenamente satisfactorias. Consecuencias de
un hecho antinatural
• Así pues, vemos que el ser humano es el único
mamífero que jamás se desteta y que consume
leche de otras especies
• Esto es en definitivaalgo totalmente imprevisto
por la Naturaleza, peroentonces ¿constituye una
práctica favorable y totalmente inocua?
• Los investigadores están
cada vez más convencidos
de que no es así. Un riesgo para la salud
Cada vez es mayor el número de especialistas en nutrición
que cuestionan el valor de los productos lácteos, a la
luz de
numerosos estudios que han asociado su consumo con
una gran variedad de problemas de salud, contradiciendo
en muchos casos el concepto de “alimento básico”
que popularmente se tiene de ellos.
A continuación repasaremos algunas de las enfermedades
que los estudios han relacionado con el consumo de
lácteos.
Mucosidad
• Muchas personas son ya conscientes de que
la leche de vaca produce más mucosidad que
cualquier otro alimento, un moco espeso,
denso, que obtura todo el sistema respiratorio
del organismo, que atasca las membranas
mucosas e invita a la enfermedad
• No en vano, la caseína (principal proteína de la leche
de vaca) se
utiliza para fabricar pegamentos
• La fiebre del heno, el asma, la bronquitis, la
sinusitis, los resfriados, el
goteo nasal y las infecciones de oído se deben
principalmente a los
productos lácteos. En general, también tienen una gran
influencia en
las alergias
• Estas relaciones se pueden comprobar muy fácilmente dejando
de
consumir lácteos durante un periodo de prueba y
observando la
mejoría, si se padece alguna de estas dolencias.
Intolerancia a la lactosa
• La intolerancia a la lactosa es común en muchas
personas, especialmente entre los de raza no caucásica.
Se trata de algo normal: tras la infancia, en condiciones
normales, nuestro sistema digestivo no necesitaría estar
preparado para digerir leche porque no debería recibirla.
• Los síntomas, que incluyen molestias
gastrointestinales, diarrea y
flatulencia, suceden porque estos individuos no poseen
los enzimas
que digieren la lactosa.
• Por esto, han lanzado al mercado leches sin lactosa
• También se suele recomendar el yogur porque su lactosa
está
predigerida. Sin embargo, la galactosa resultante ha sido
relacionada
con otros problemas: las cataratas en los ojos, el cáncer
de ovario y la
infertilidad.
Enfermedades cardiovasculares
• Ciertos estudios han relacionado algunos componentes
específicos de los lácteos con las enfermedades
cardiovasculares, entre ellos la proteína y la lactosa.
Pero existe el consenso general de que los niveles
altos de colesterol son el principal factor de riesgo
• Los lácteos aportan a la dieta cantidades importantes
de colesterol y grasa, que pueden aumentar el riesgo de
diversas enfermedades crónicas incluyendo las
cardiovasculares
• No se sabe con certeza qué desencadena el daño arterial
en la aterosclerosis.
Algunos investigadores han acusado a la homogeneización
de la leche como
responsable, pues dicho proceso hace posible que un
componente enzimático
de la leche, la xantino-oxidasa, pase al flujo sanguíneo
sin ser digerido, y
provocaría así lesiones en el tejido de las paredes
arteriales
• Existen lácteos desnatados; sin embargo, la proteína
animal por sí misma
también eleva los niveles de colesterol, y además
acarrean otros riesgos de
salud como se indica a continuación
• Y la grasa retirada de la leche no se tira a la basura,
sino que va a parar a otros
alimentos y acaban llegando al consumidor.
Cáncer
• Los lácteos son ricos en PROTEÍNAS y GRASAS,
con lo cual estimulan directamente el
crecimiento de las células cancerosas.
• Contienen HORMONAS de la vaca: por un lado
estrógenos (que se suman a la acción estimulante
de la grasa), y por otro lado factores de crecimiento
como el IGF-1,
que estimula la proliferación celular e inhibe la muerte
celular
programada. En la leche hay otras hormonas que favorecen
el cáncer.
• LACTOSA: se ha observado una relación directa de la lactosa
con el
cáncer de ovario (por la incapacidad de descomponer la
galactosa).
• Los estudios epidemiológicos han mostrado una relación
entre el
consumo de productos lácteos y los cánceres de: mama,
próstata,
ovario, útero, pulmón, linfoma y testicular.
Diabetes
• La diabetes dependiente de insulina (tipo 1 o juvenil)
está asociada al consumo de lácteos. Múltiples estudios
epidemiológicos de diversos países muestran una fuerte
correlación entre ella y el nivel de consumo de lácteos.
• Se cree que se debe a una reacción de tipo
autoinmune asociada a una proteína de la leche:
el organismo genera anticuerpos que a su vez dañan
las células del páncreas y se pierde su función.
La homogeneización de la leche permite el paso de
proteínas no digeridas al flujo sanguíneo (envueltas en
la grasa
homogeneizada), y esto sería lo que causa la producción
de anticuerpos.
Un proceso autoinmune similar se produce en el caso de
otras dolencias,
como la esclerosis múltiple o la artritis reumatoide.
• En el caso de la diabetes tipo 2, su causa es
totalmente distinta. Se ha
observado que es la dieta rica en calorías y grasas lo
que aumenta la
resistencia a la insulina y conduce a la diabetes. Pero
igualmente los
productos lácteos son una parte fundamental de la dieta
rica en grasas.
La paradoja del calcio
• En relación con el calcio, todo se ha construido
en torno a un mito infundado que asocia la falta
de calcio en el organismo con la falta de calcio
en la dieta. Lo cierto es que nada más lejos de la
realidad: por mucho calcio que se añada a la
dieta, si los hábitos de vida en conjunto son
incorrectos, las pérdidas de calcio
seguirán representando un problema.
• Diversos estudios han obtenido resultados destacables,
como el Estudio de
Salud de Enfermeras de Harvard, que siguió a más de
75.000 mujeres durante
12 años, mostrando que el aumento del consumo de leche no
tiene un efecto
protector sobre el riesgo de fracturas. De hecho, el
consumo superior de calcio
procedente de los lácteos estaba asociado a un mayor
riesgo de fracturas.
• Se sabe que se puede reducir el riesgo de osteoporosis
reduciendo la presencia
de sodio y proteína animal en la dieta, aumentando el
consumo de frutas y
verduras, haciendo ejercicio, y asegurando un adecuado
consumo de calcio
procedente de vegetales tales como las hortalizas de
hojas verdes, las
legumbres y los frutos secos. Por ejemplo, una ración de
brécol contiene tanto
calcio aprovechable como un vaso de leche, además de
muchos otros
nutrientes saludables.
La paradoja del calcio (2)
• Por otro lado, tenemos otro estudio muy
interesante: el Estudio de Nutrición Cornell-Oxford-
China, conocido como Proyecto China por haber
sido realizado en China continental y Taiwan. Es un
estudio masivo sobre más de 10.000 familias
diseñado para estudiar la dieta, el estilo de vida y
las enfermedades a lo ancho de las lejanas áreas
rurales de China. Mediante la investigación
simultánea de más enfermedades y más
características dietéticas que ningún otro estudio
hasta la fecha, el proyecto ha generado la base de
datos más completa del mundo sobre las múltiples
causas de la enfermedad.
• En este estudio se observó que los chinos (que
tradicionalmente nunca han consumido lácteos y en
general su ingesta de calcio es baja), presentan un
riesgo muy inferior de osteoporosis, y las fracturas
de cadera allí son poco frecuentes. Antibióticos,
hormonas y contaminantes
• Se suelen utilizar comúnmente hormonas sintéticas para
las vacas
lecheras con el fin de aumentar la producción de leche.
Debido a que
las vacas están produciendo cantidades de leche que la
naturaleza
jamás previó, el resultado obtenido es la mastitis, o
inflamación de las
glándulas mamarias.
• Su tratamiento requiere el uso de antibióticos, y se
han encontrado
restos de ellos y de hormonas en muestras de leche y otros
lácteos.
• Los residuos de pesticidas y de otros medicamentos
también son
contaminantes frecuentes de los productos lácteos no
ecológicos.
En la infancia
• Las proteínas, el azúcar de la leche, la grasa
y la grasa saturada de los lácteos pueden
representar riesgos de salud para los niños
y conducir al desarrollo de enfermedades
crónicas tales como obesidad, diabetes y
formación de placas ateroscleróticas que
pueden conducir a problemas cardíacos.
• La Academia Americana de Pediatría recomienda que los bebés
menores de un año no reciban leche entera de vaca, ya que
la
deficiencia de hierro es más probable con una dieta rica
en lácteos.
• Uno de cada cinco bebés sufren cólicos: los pediatras
aprendieron
hace tiempo que la leche de vaca era a menudo la razón.
• Además, las alergias a los alimentos parecen ser un
resultado común
del consumo de leche, particularmente en los niños.
Aspectos éticos
Si nos preocupa realmente cómo afectan nuestros hábitos
dietéticos a otras criaturas del reino animal, y deseamos
evitar que
los animales deban morir o sufrir para proporcionarnos
alimento,
no podemos obviar el hecho de que los productos lácteos
son
obtenidos actualmente aplicando técnicas productivas poco
respetuosas con las vacas, las cuales en muchas ocasiones
reciben
un trato más degradante incluso que otros animales
destinados al
consumo humano.
Aspectos ecológicos
• La gente ya se está
concienciando de nuestra
influencia sobre el planeta, sobre
el calentamiento global y el
cambio climático.
• Uno de los principales factores
de degradación ambiental es:
la ganadería
• Según un reciente informe de la
FAO, el sector ganadero genera
más emisiones de gases
invernadero medidas en
equivalencia de CO2 que el
transporte (el 18 por ciento).
Aspectos ecológicos (2)
• Más de la mitad del agua consumida en el mundo
se emplea en la ganadería y regando tierras para obtener
piensos. Producir 1 kilo de carne de vacuno utiliza 100
veces más agua que
producir 1 kilo de trigo y 50 veces más agua que producir
1 kilo de arroz.
• Un 44% de la cosecha mundial de cereales se destina
para consumo del
ganado. El 95% de la producción mundial de soja se
destina a consumo
animal.
• Los residuos de las explotaciones ganaderas superan la
capacidad de
absorción de las tierras y contaminan las aguas
subterráneas.
• Un terreno de cultivo suficiente para alimentar a 12
personas a base de
plantas y cereales, sólo puede sustentar a una persona si
las plantas las
consume un animal para producir carne.
• Las vacas lecheras forman parte de la industria cárnica.
Cuando su producción
decae, son enviadas al matadero.
En resumen:
Productos lácteos…
¿sí o no?
• Problemas con las grasas
• Problemas con las proteínas
• Problemas con el calcio
• Problemas con las hormonas
• Problemas con los contaminantes
• … y además NO son
necesarios en el ámbito
de una dieta equilibrada.
LOS PRODUCTOS LÁCTEOS
SON OPCIONALES
Podemos excluir los lácteos de nuestra dieta
sin ningún tipo de problema,
y esto nos puede aportar, como hemos visto,
diversas ventajas para la salud.
Cómo reemplazar los productos lácteos
• El hecho de renunciar al consumo de productos lácteos
puede
acarrear problemas, pero no tanto para la salud física
sino más bien de
tipo social o psicológico, pues en el mundo actual se da
un uso
indiscriminado de productos lácteos, que se han
introducido en las
costumbres más cotidianas y además forman parte de una
gran
mayoría de los alimentos elaborados que se consumen
habitualmente
• Renunciar a ellos puede dar la impresión de no poder
consumir casi
ninguno de los alimentos que solíamos consumir, y de
restringir
enormemente nuestra variedad dietética. La solución está,
una vez
más, en utilizar nuestra imaginación, explorar nuevos
alimentos y
buscar sustitutos eficaces
• IMPORTANTE: los sustitutos no reemplazan a la leche de
vaca en
cuanto a composición nutricional, sino en cuanto a usos
• A continuación damos unas breves indicaciones sobre
cómo se
pueden reemplazar los lácteos más comunes