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Preocupaciones de los consumidores sobre las hormonas en los alimentos.

POR EL DOCTOR. CARLOS ARTURO ALLEN SISNIEGA.

Este documento aborda algunas de las preocupaciones de los consumidores que se han señalado a BCERF con respecto a los efectos de salud de hormonas utilizados por las industrias de carne y productos lácteos. Pruebas disponibles hasta el momento, aunque no concluyentes, no vincular residuos de hormonas en la carne o leche con cualquier efecto de salud humana.
¿Cuáles son las hormonas?
Las hormonas son sustancias químicas que se producen naturalmente en los cuerpos de todos los animales, incluidos a los seres humanos. Son mensajes químicos liberados en la sangre mediante la producción de la hormona órganos que viajan y afectan a diferentes partes del cuerpo. Las hormonas pueden ser producidas en pequeñas cantidades, pero controlan funciones importantes del cuerpo como el crecimiento, desarrollo y reproducción.
Las hormonas pueden tener diferente química. Pueden ser esteroides o proteínas. Las hormonas esteroides son activas en el cuerpo cuando se come. Por ejemplo, las píldoras anticonceptivas son las hormonas esteroides y puede tomarse por vía oral. En contraste, las hormonas de la proteína se desglosan en el estómago y pierden su capacidad para actuar en el cuerpo cuando se come. Por lo tanto, normalmente, las hormonas de la proteína que se inyecta en el cuerpo para tener un efecto. Por ejemplo, la insulina es una hormona de proteína. Los pacientes diabéticos deben ser inyectado con insulina para el tratamiento.
¿Por qué se utilizan hormonas en la producción de alimentos?
Ciertas hormonas pueden hacer animales jóvenes ganar peso más rápido. Ayudan a reducir el tiempo de espera y la cantidad de alimentos consumidos por un animal antes del sacrificio de industrias cárnicas. En vacas lecheras, hormonas pueden utilizarse para aumentar la producción de leche. Así, las hormonas pueden aumentar la rentabilidad de las industrias de lácteas y carne.
¿Por qué están los consumidores preocupados por las hormonas en los alimentos?
Mientras que una variedad de hormonas son producidos por nuestros cuerpos y son esencial para el normal desarrollo de los tejidos sanos, se han encontrado las hormonas esteroides sintéticas utilizadas como fármacos, afectar el riesgo de cáncer. Por ejemplo, el Dietilestilbestrol (DES), un fármaco de estrógeno sintético usado en la década de 1960 fue retirado del uso cuando fue encontrado a aumentar el riesgo de cáncer de la vagina en hijas de mujeres tratadas. Exposición de por vida al estrógeno natural hormona esteroide también está asociada con un mayor riesgo de cáncer de mama (ver BCERF hecho hoja # 09 estrógeno y riesgo de cáncer de mama: ¿cuál es la relación?). Por lo tanto, los consumidores están preocupados por si están siendo expuestos a las hormonas que se utiliza para tratar a los animales, y si estas hormonas afectan a la salud humana. Intentamos abordar esta cuestión compleja basada en pruebas científicas que están disponible actualmente.
Historia de la hormona se utilice en la producción de alimentos
Ya en la década de 1930, se vio que las vacas con materiales procedentes de bovinos (vaca) pituitaria glándulas (hormona secretar órgano) producción más leche. Más tarde, la hormona del crecimiento de la glándula pituitaria bovina (bGH) fue encontrada responsable de este efecto. Sin embargo, en ese momento, la tecnología no existía cosecha suficiente de este material para su uso a gran escala en animales. En la década de 1980, se hizo posible producir grandes cantidades de bGH puro mediante la tecnología de ADN recombinante. En 1993, los alimentos y drogas (FDA) aprobaron la bovina hormona de crecimiento recombinante (rbGH), también conocido como bovina somatotropina (rbST) para su uso en ganado lechero. Estimaciones recientes por el fabricante de esta hormona indican que el 30% de las vacas en los Estados Unidos (US) pueden ser tratado con rbGH.
El hormona sexual femenina estrógeno también se demostró que afectan a las tasas de crecimiento en el ganado y las aves de corral en la década de 1930. Una vez que entendió la química de estrógeno, se hizo posible que la hormona sintéticamente en grandes cantidades. Estrógenos sintéticos comenzaron a ser utilizado para aumentar el tamaño de ganado y pollos en los años 50. DES fue uno de los estrógenos sintéticos primeros hecho y usa comercialmente en Estados Unidos para pollos de engorde. DES también fue utilizado como un medicamento en la medicina humana. DES se encontró que causan cáncer y su uso en la producción de alimentos fue eliminada en la década de 1970.
¿Cuáles son las diferentes hormonas utilizadas ahora por las industrias de lácteas y carne?
Hay seis tipos diferentes de las hormonas esteroides que actualmente están aprobadas por la FDA para su uso en la producción de alimentos en los Estados Unidos: estradiol, progesterona, testosterona, zeranol, acetato de trembolona y melengestrol acetato. Estradiol y progesterona son hormonas naturales de sexo femeninas; testosterona es la hormona natural de sexo masculina; zeranol, acetato de trembolona y acetato de melengesterol son promotores de crecimiento sintéticos (químicos similares a la hormona que pueden hacer animales crecen más rápido). Actualmente, las regulaciones federales permiten estas hormonas que se utiliza en el crecimiento de ganado bovino y ovino, pero no en las aves de corral (pollos, pavos, patos) o cerdos (cerdos). Las hormonas anteriores no son tan útiles en el aumento de peso de las aves de corral o de cerdos.
Como se mencionó anteriormente, la FDA permite el uso de la proteína hormona rbGH para aumentar la producción de leche en vacas lecheras. Esta hormona de proteínas no se utiliza en ganado bovino.
¿Cómo se introducen las hormonas en los animales?
Las hormonas esteroides generalmente son liberadas en el animal de un pellet (implante de oído) que se coloca debajo de la piel del oído. Las orejas de los animales son arrojadas a la basura en sacrificio. Uso indebido de pellet implantes en otras partes del animal puede resultar en mayores niveles de residuos de hormonas en la carne comestible. Las regulaciones federales prohíben su uso de esta manera. Melengestrol acetato también está disponible en una forma que puede añadirse a la alimentación animal.
Vacas lecheras se pueden inyectar debajo de la piel con rbGH. Esta hormona está disponible en paquetes de inyecciones de dosis única para reducir las posibilidades de sobredosis accidental.
¿Agencias federales vigilar la presencia de estas hormonas en los alimentos?
Estradiol, progesterona y la testosterona son las hormonas sexuales que son elaboradas naturalmente por animales. Ningún control reglamentario de estas hormonas es posible, ya que no es posible separar o la diferencia entre las hormonas que se utiliza para el tratamiento de los realizados por el organismo propio de los animales. Sin embargo, es posible detectar residuos de acetato zeranol y trembolone en la carne de los animales. FDA ha establecido los niveles de tolerancia de estas hormonas. Una tolerancia es la cantidad máxima de un residuo especial que puede permitirse en o sobre los alimentos (ver BCERF hecho hoja # 25 de control de residuos de plaguicidas y seguridad alimentaria). Alimentos seguridad inspección servicio (FSIS) de nosotros departamento de agricultura (USDA) supervisa la carne de ganado para zeranol residuos. FSIS supervisa también carnes DES residuos de cualquier uso ilegal de (DES uso ya no es permitido). En respuesta a la preocupación por los casos de pubertad precoz en Puerto Rico se describe a continuación, un gran número de muestras de carne se probaron los residuos de hormonas en los mediados o finales de los 80. Zeranol ni DES residuos fueron encontrados en las muestras de carne en esta encuesta.
¿Subsisten las hormonas en la leche o carne de animales tratados?
Los niveles de hormonas producidas naturalmente varían de animal a animal, y una gama en estos niveles se sabe que es normal. Porque no es posible diferenciar entre las hormonas producidas naturalmente por el animal y los utilizados para tratar a los animales, es difícil determinar exactamente la cantidad de la hormona para tratamiento permanece en la leche o la carne. Los estudios indican que si se siguen los procedimientos de sacrificio y tratamiento correcto, los niveles de estas hormonas pueden ser ligeramente mayores en la leche o la carne de los animales tratados, pero son todavía dentro del rango normal de variación natural conocido en animales no tratados. Actualmente, los científicos están intentando desarrollar mejores métodos para medir residuos de hormona esteroide dejado en comestibles de un animal tratado.
¿Pueden hormonas esteroides en carne afectan a la edad de la pubertad para las niñas?
Pubertad precoz en las niñas se ha encontrado a asociarse con un mayor riesgo de cáncer de mama. Altura, peso, dieta, ejercicio y antecedentes familiares han resultado para influir en la edad de la pubertad (ver BCERF hecho hoja # 08, eventos de la vida de la infancia y el riesgo de cáncer de mama). Las hormonas esteroides en los alimentos eran sospechosos de causar pubertad precoz en las niñas en algunos informes. Sin embargo, nunca ha sido documentada exposición a mayor que los niveles naturales de las hormonas esteroides a través de la carne tratada con hormonas o aves de corral. No han hecho grandes estudios epidemiológicos para ver si o no la pubertad temprana en el desarrollo de las niñas se asocia con haber comido alimentos tratada con hormonas de crecimiento.
Una preocupación de un aumento en los casos de niñas que llegar a la pubertad o menarquia temprano (ocho años o menores) en Puerto Rico, llevó a una investigación en la década de 1980 por los centros para el Control de enfermedades (CDC). Muestras de carne y pollo de Puerto Rico fueron probadas los residuos de hormonas esteroides. Un laboratorio encontró una muestra de pollo de un mercado local que más alto que el nivel normal de estrógeno. También, residuos de zeranol informaron en la sangre de algunas de las niñas que habían alcanzado la pubertad temprana. Sin embargo, estos resultados no se pudieran comprobar por otros laboratorios. Tras la investigación de los CDC, USDA probó muestras de aves de corral, carne y leche de 150 a 200 de Puerto Rico en 1985 y encuentra sin residuos de DES, zeranol o estrógeno en estas muestras.
En otro estudio en Italia, residuos de hormona esteroide en carne y aves de corral en comidas escolares eran sospechosos como la causa de la ampliación de la mama en niños y niñas muy jóvenes. Sin embargo, las muestras de carne de aves de corral sospechosas no estaban disponibles para comprobar la presencia de hormonas. Sin pruebas que ocurrió la exposición a niveles más altos de las hormonas esteroides a través de alimentos, no es posible concluir o no comer carne tratada con hormonas o aves de corral causaron el agrandamiento de las mamas en estos casos.
¿Puede comer carne de animales de hormonas afectan el riesgo de cáncer de mama?
No existen pruebas para responder a esta pregunta. La cantidad de la hormona esteroide que se come a través de la carne de un animal tratado es insignificante en comparación con lo que el cuerpo humano produce cada día. El riesgo de cáncer de mama de la mujer que comer carne de animales de hormonas no ha sido comparado con el riesgo de las mujeres que comer carne de animales no tratados.
¿Puede beber leche, o consumo de productos lácteos de riesgo de cáncer de mama de hormonas animales afectan?
Una vez más, no existe evidencia para responder a esta pregunta. Uso de rbGH para ganado lechero ha sido en la práctica en nosotros sólo seis o siete años. El cáncer de mama puede tardar muchos años en desarrollarse. Es demasiado pronto para estudiar el riesgo de cáncer de mama de la mujer que beber leche y comer productos lácteos procedentes de animales tratados con hormonas.
¿Las hormonas que permanecen en la leche pueden afectar la salud humana?
Los científicos de centro la FDA de medicina veterinaria han analizado los estudios presentados por los fabricantes de rbGH. Los científicos de la FDA han concluido que comer alimentos con niveles ligeramente superiores de rbGH podría no afectar la salud humana. Esto es porque la cantidad de rbGH de leche o productos lácteos como resultado del tratamiento de los animales es insignificante con la cantidad de la hormona de crecimiento que es producida naturalmente por nuestros cuerpos. También, rbGH es una hormona de proteínas y es digerida en fragmentos más pequeños (péptidos y aminoácidos) cuando comen. La hormona rbGH para ganado lechero es eficaz en la promoción del crecimiento en las vacas, pero no funciona en los seres humanos. Los científicos saben que rBGH no se reconoce como una hormona por las células humanas.
Existen lagunas en nuestro conocimiento acerca de si rbGH usado para tratar el ganado lechero puede causar efectos indirectos. Estas brechas llevan a incertidumbres y debates, algunos de los cuales se abordan a continuación.
¿Lo que sabemos acerca de los factores de crecimiento en la leche de los animales tratados?
La salubridad de la leche no se ve afectada por tratamiento de rbGH. Sin embargo, algunos cambios sutiles tienen lugar en los animales tratados. La hormona de crecimiento normalmente actúa por la activación de las células que otros químicos, llamados factores de crecimiento. Estos factores de crecimiento realmente causa el aumento en la producción de leche y la tasa de crecimiento. Leche de ganado vacuno tratada con rbGH se ha encontrado que ligeramente mayores niveles de la proteína producida naturalmente llamada dependientes de insulina factor de crecimiento-1 (IGF-1). IGF-1 es una proteína y se digiere en pedazos más pequeños en el estómago.
Los científicos de la FDA han considerado las pruebas de los estudios de riesgo de cáncer en personas que tienen el cuerpo naturalmente altos niveles de IGF-1. Mayores niveles de IGF-1 en sangre hallados en las mujeres con cáncer de mama, en comparación con las mujeres sin cáncer de mama en el estudio de salud de las enfermeras basada en Harvard. Los científicos están investigando si IGF-1 está presente sólo en los niveles superiores en los pacientes de cáncer de mama o si tiene un papel en el aumento del riesgo de la enfermedad. En estudios de laboratorio, las células de cáncer de mama crecen en un plato de plástico, crecen a un ritmo más rápido cuando bañado en una solución que contenga IGF-1. Sin embargo, IGF-1 también desempeña un papel importante en ayudar a las células normales a crecer. Por lo tanto, en estos pocos estudios, no podemos concluir o no IGF-1 aumenta riesgo de cáncer de mama.
Los científicos de la FDA han concluido que el IGF-1 en la leche es poco probable que se presente cualquier preocupación de seguridad de la alimentación humana por las siguientes razones: 1) niveles de IGF-1 en la leche de animales no tratados varían en la naturaleza, en función del número de terneros y la etapa de lactancia; 2) IGF-1 también está presente en la leche materna, en los niveles más altos que en la leche de vaca de hormonas; 3) IGF-1 en la leche no se espera que actúe como un factor de crecimiento en las personas que beben porque se obtiene digerido en el estómago; 4) IGF-1 debe ser inyectada en la sangre para tener un efecto de promover el crecimiento; y 5) mayores niveles de IGF-1 en los alimentos no se esperan que como resultado de mayores niveles de sangre de IGF-1 en los seres humanos que consumen los alimentos.
Preocupación por alergias relacionadas con leche
Una discusión detallada de este tema queda fuera del alcance de este documento. Una breve descripción de lo que se presenta aquí, junto con las referencias para obtener más información. Digerida o desglosadas fragmentos de proteínas absorbidas por el estómago pueden causar que el sistema inmunológico a producir anticuerpos, que a veces pueden provocar alergias relacionadas con la leche. Se han realizado estudios para investigar si el sistema inmunológico puede reaccionar a fragmentos de rbGH y IGF-1 absorbido por el estómago. Revisores de estos estudios en salud de Canadá (la contraparte canadiense a la FDA) expresaron la preocupación de que en un estudio, algunas de las ratas de laboratorio que fueron alimentadas a altos niveles de rbGH para 90 días desarrollaron anticuerpos contra (http://www.hc-sc.gc.ca/english/archives/rbst). Científicos de la FDA evalúa estos estudios en ratas y concluyó que sólo los animales que se alimentan una gran cantidad de rbGH en alimentos producción anticuerpos contra ella. Esas grandes cantidades de rbGH no se esperan que se produzca en la que los seres humanos a beber leche ("Informe sobre la comida y revisión la administración de drogas de la seguridad de la somatotropina bovina" disponible en: http://www.fda.gov/cvm/; una copia de este informe puede solicitarse llamando: 310-574-1755).
Los estudios también han estudiado si IGF-1 alimentados a ratas de laboratorio y digerido en el estómago puede afectar el sistema inmunitario. No inmunes se observaron efectos en estos estudios, pero los animales fueron alimentados IGF-1 por sólo dos semanas. Se han hecho ningún estudio sobre los efectos de la alimentación de ratas u otros animales experimentales con IGF-1 durante períodos más prolongados de tiempo.
¿Son hormonas animales saludables?
Hay una preocupación que debido a un aumento de ordeño, vacas hormonas pueden ser más propensas a la infección de las ubres, llamada mastitis. Esto podría conducir a más antibióticos que se utilizan para tratar las vacas, a su vez lo que más residuos de antibióticos en la leche. Exposición frecuente a residuos de antibióticos a través de la leche o productos lácteos es una preocupación de salud para las personas a largo plazo. En el cuerpo normal, hay bacterias que viven en el intestino y boca y ayudan en la digestión de alimentos en el intestino. Normalmente estas bacterias "amigables" no causan enfermedad ya que el sistema inmunológico les mantiene bajo control. Sin embargo, si el sistema inmunológico es débil, estas bacterias "amigables" pueden invadir los tejidos y causar infección. Las bacterias en el cuerpo normal que ven a través de pequeñas cantidades de antibióticos con frecuencia, puede desarrollar formas de sobrevivir a los antibióticos y convertirse en "resistentes a los antibióticos." En casos de infección y la enfermedad, vuelve más difícil controlar tales bacterias resistentes con los antibióticos disponibles.
Se observó algún aumento en la incidencia de los residuos de antibióticos en la leche de vaca tras el uso de rbGH. Al mismo tiempo como rbGH comenzó a ser utilizado, algunos de los principales Estados de lácteos en Estados Unidos cambiaron un método nuevo y mejorado para probar para los residuos de antibióticos. Es difícil determinar si el incremento en la incidencia de los residuos de antibióticos en la leche fue debido al incremento en el uso, o mejores métodos de prueba. NYS (estado de Nueva York) fue uno de los Estados que no habían cambiado su método para probar para los residuos de antibióticos en la leche en ese momento. La incidencia de los residuos de antibióticos en la leche del Estado de Nueva York no resultó para ser mayor después de la aprobación de rbGH. Esto sugiere que el aumento de la incidencia de los residuos de antibióticos observada en algunos Estados puede haber sido debido a mejores métodos en lugar de un aumento en el uso de antibióticos para el tratamiento de mastitis. Un Comité de expertos de la FDA centro de medicina veterinaria ha concluido que mientras rbGH uso puede provocar un ligero aumento en la mastitis, prácticas de manejo de productos lácteos que están actualmente en uso deben evitar cualquier aumento de residuos de antibióticos en la leche.
¿Se utilizan en otros lugares las hormonas de crecimiento en el mundo?
El debate sobre si las hormonas de crecimiento debe o no debe utilizarse para la producción de alimentos se ha convertido en una cuestión política. En 1989, la Comunidad Europea (ahora Unión Europea) emitió una prohibición de todas las carnes de animales tratados con hormonas de crecimiento esteroides, que sigue en efecto. Se permite el uso de las hormonas esteroides para ganado bovino en Canadá.
Países de la Unión Europea no permiten el uso de la proteína hormona rbGH, para ganado lechero. En 1999, el Gobierno canadiense negó autorización para la venta de rbGH para ganado lechero, basado en preocupaciones sobre los efectos de salud de mastitis animales tratados.
Conclusiones
Los estudios realizados hasta el momento no proporcionan pruebas para afirmar que los residuos de hormonas en la carne o productos lácteos causan efectos de salud humana. Sin embargo, una conclusión sobre la falta de efectos de salud humana sólo es posible después de estudios a gran escala comparan la salud de las personas que comen carne o productos lácteos de hormonas animales, a las personas que comen una dieta similar, pero de animales no tratados.
¿Donde se necesita más investigación?
Algunas de las preocupaciones de los consumidores en esta hoja de datos no pueden ser respondida de manera concluyente sin estudios adicionales:
La exposición a las hormonas en la carne era sospechoso como la causa de la pubertad precoz en las niñas en Puerto Rico e Italia, pero nunca se comprobó. Concluyentemente la pregunta, estudios epidemiológicos a gran escala se necesitaría para comparar la edad de la pubertad en las niñas que comer carne de animales de hormonas a quienes comen carne de animales no tratados. Tales estudios serían necesario para asegurarse de que otros conocidos influencias que afectan a la edad de la pubertad en las niñas no están jugando un papel.
Estudios dea corto plazo en ratas de laboratorio no han indicado una preocupación de alergias relacionadas con leche o efectos inmunológicos de la exposición a rbGH o IGF-1 en productos de leche o productos lácteos. Sin embargo, los estudios a corto plazo no se puede utilizar para descartar todas las posibilidades de cualquier efecto de salud inmune, o inesperado después de la exposición a largo plazo. Estudios en laboratorio en animales sobre los efectos de la exposición permanente a la leche de vacas tratadas rbGH pueden ayudar a responden a esta pregunta.
Algunos consejos de dieta que también ayudan a reducen la exposición a las hormonas que se utiliza en la producción de alimentos
Aunque actualmente las pruebas disponibles no indican un vínculo entre el consumo de productos de carne, leche o productos lácteos de hormonas animales y los efectos de salud, adoptando algunas conocida dieta saludable hábitos (véase a continuación) pueden ayudar a reducir la exposición a las hormonas utilizados en la producción de carne, aves de corral y productos lácteos.
Comer una dieta variada, rica en frutas, granos y verduras.
Comer carnes con moderación, bien cocinada, pero no achicharrados.
Comer más carne magra, el hígado y menos grasa.
Preparado por el asociado de investigación BCERF de Renu Gandhi, Ph.d. y Suzanne M. Snedeker, Ph.d., líder del proyecto de investigación, BCERF